La CNDH señala que alarma la ausencia de efectividad de las políticas para la atención de periodistas; sólo se dedican a llevar coronas
Ningún orden de gobierno, ni el federal ni el estatal y mucho menos el municipal, tiene políticas y mucho menos mecanismos efectivos para garantizar la seguridad de los periodistas o de los trabajadores de los medios de comunicación.
Así lo señala la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en un comunicado donde lamenta el asesinato del periodista Julio Valdivia: «Por ello, este Organismo Nacional reitera su preocupación por la ausencia de acciones y estrategias coordinadas de las instancias de los tres órdenes de gobierno del Estado mexicano, tendentes a garantizar la vida, seguridad e integridad personal de las y los periodistas, pues dichas agresiones constituyen un obstáculo e inhiben el pleno ejercicio del derecho a la libertad de expresión en nuestro país».
A mi amigo Rafael Junquera lo conocí en el año 1998, cuando iniciaba el gobierno de Miguel Alemán. La primera reunión que tuvimos fue en casa de Raúl Hernández Viveros en donde también estuvo Roberto Williams, Esther Mandujano y Jesús Miguel Montes. Junquera regresaba a Veracruz como si de un exiliado se tratara. En esa ocasión nos habló de su vocación por la política, pero ante personas con vocación por las letras también nos habló de su trabajo literario. Recuerdo de esa tarde la lectura de un poema sobre una gota de agua, sus discusiones sobre la izquierda, las anécdotas del joven de los años setentas que llegaba a Veracruz después de haber estado en la cárcel de Lecumberri. Recuerdo la fuerza de su carácter y la defensa a ultranza de su verdad, si alguien defendía su verdad era precisamente Rafael Junquera.
Cuando alguien quiere sacar raja política o ganancia de algún movimiento burocrático desde una posición de poder, a eso se le llama plan con maña. Y es que la insistencia de las autoridades de la SEV para que los maestros llenen un nuevo formato de seguro institucional, supuestamente con el objetivo de ofrecer mayor tranquilidad al magisterio y sus familias, deja en qué pensar. La Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), en voz del polémico Zenyazen Escobar, presentó el nuevo Seguro de Vida Institucional, el cual supuestamente ofrece mayores beneficios a docentes, personal administrativo y de apoyo a la educación con plazas estatales y federales.
El diputado Sergio Mayer no ha dejado de salir en entrevistas donde muestra el supuesto dolor que le causa la muerte de su gran amigo Xavier Ortiz. «Es uno de los días más tristes de mi vida», dice mientras muestra la veladora que encendió por el exgaribaldi, quien hace unos días se suicidó aparentemente abrumado por los problemas económicos y familiares. Mientras Sergio Mayer intenta verse como el magnánimo ser que perdió a un amigo, en redes sociales ya se habla de la hipocresía de un sujeto que está lucrando con la muerte de una persona a la que bien pudo haber ayudado.
No tiene vergüenza Hugo López-Gatell. El tópico de este subsecretario de Salud fue equivocarse una, dos, tres, cuatro veces y así hasta sumar más de una docena de errores. No tiene manera de ocultarlo pues los pronósticos que daba un día, a las pocas semanas ya se habían convertido en errores. ¿Se los recordamos?: En mayo se llegará al pico de la pandemia; el uso de cubrebocas no es importante; llegaremos a 15 mil muertos, llegar a 60 mil sería una catástrofe; el presidente de México tiene una inmunidad moral; ya aplanamos la curva de la pandemia.
Reza la Escritura que un amo saldría de viaje al extranjero y antes de viajar le dejó encargado a sus tres mayordomos, a uno cinco talentos, a otro, dos talentos y al tercero un talento. El que recibió cinco talentos negoció con ellos y obtuvo cinco talentos más. El que recibió dos también negoció y obtuvo dos más. Pero el tercer mayordomo, el cual sólo había recibido un talento, ese por miedo escondió el talento en la tierra. Cuando el amo llegó el que recibió cinco le entregó diez talentos, el que recibió dos entregó cuatro talentos y el que recibió uno le dijo: «Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo».
En estos tiempos inciertos, donde la pandemia del covid-19 ha sacudido la vida de los mexicanos y sus instituciones, el SNTE está obligado a convocar a un Congreso Nacional para reformar el estatuto y elegir a la nueva dirigencia nacional por voto secreto, libre y directo de sus afiliados. Antes del 20 de marzo, día en que dio principio la cuarentena por el covid-19, el SNTE, de manera gandalla, intentó renovar las secciones de Tlaxcala, Nuevo León y Baja California Sur.
Julio Valdivia se ocupaba de la nota roja del diario El Mundo de Córdoba. La tarde de este jueves fue hallado sin vida. Reportes de personas cercanas a él señalan que había recibido amenazas en meses pasados; quizá no tan directas como las del secretario de Gobierno al periódico El Dictamen: «El que se lleva se aguanta»; quizá más directas que esa amenaza. El periodista fue hallado en la zona montañosa de Tezonapa, cerca de las vías del tren. El reporte señala que además de señas de tortura, Julio Valdivia fue decapitado; la motocicleta que usaba para transportarse estaba a un lado de su cadáver.
Los maestros trabajan más con la pandemia, pareciera que no es así, sin embargo, la gran mayoría tuvo que actualizarse con las diferentes aplicaciones para poder impartir sus clases a distancia. Sin mencionar que la preparación de sus clases, se complica un poco, ya que se requiere contar con internet de buena capacidad, que les permita sostener audio y video. Algunos han señalado que muchos padres de familia y alumnos, están en constante comunicación mediante el WhatsApp a cualquier hora.
Dice el presidente de México: «Si es un artículo de Loret de Mola sobre nosotros, pues ya nada más con el título, ya se sabe que es un ataque». Lo que no entiende el presidente de México es que con esos berrinchitos que hace sólo le da al periodista más publicidad. Andrés Manuel López Obrador está haciendo a Carlos Loret de Mola lo que Peña Nieto a Carmen Aristegui; y aquí no se trata de comparar a los periodistas. Carlos Loret fue quien dio a conocer los videos del hermano de López Obrador recibiendo “aportaciones” para la campaña de 2018.