Menores de Chiapas explotados en las ciudades; ¡eso ya no es noticia!
¿Es noticia que en Tepic se haya rescatado a ocho menores de edad provenientes de Chiapas? Tres adultos los “administraban” mandándolos a pedir dinero a las esquinas vestidos de payasitos y haciendo malabares. Puede parecer sardónico, pero en México eso ya no es noticia. No hay ciudad grande en este país que no cuente al menos con una o dos células de explotadores, de sujetos sin escrúpulos que van a Chiapas, a las comunidades más pobres para reclutar niños y explotarlos.
Lo más grave de todo es que, a pesar de la explotación, a pesar de las condiciones insalubres en que los tienen, a pesar del riesgo del abuso físico y sexual, los menores están en mejores condiciones que en su comunidad. Así de infamante ha de ser la condición en que se encuentran, que el purgatorio de explotación que padecen no se compara con el infierno de sus comunidades.
La pobreza es uno de los más graves problemas que debe combatir el próximo gobierno, la pobreza real, severa, intensa. Esa que obliga a los padres a entregar a sus hijos para que se vayan a ganar unos cuantos pesos y que al menos tengan algo que comer a diario. Si usted ve niños explotados en las esquinas de su ciudad, eso se debe a que ni su estado ni a su municipio importan esos menores.
Ser agradecido es uno de los valores que poco a poco hemos ido perdiendo. Quienes todavía conservan este valor recuerdan cuando salían de paseo con la madre, al centro comercial, al parque y se encontraban a una persona que les obsequiaba una golosina o que les dirigía un halago. Las buenas madres volteaban a vernos y nos exhortaban: «¿Cómo se dice?». Gracias era entonces una palabra muy fácil de decir, era una expresión sencilla que encerraba un gesto cordial, alegre, humano; gracias acompañado de una sonrisa o de un gesto tímido de humildad en el rostro de un niño es la cosa más tierna del mundo.
Cómo estará el gremio literario en Xalapa que en una feria del libro los reconocimientos son para una maestra de ballet, un músico y un escultor. Por supuesto, no se le está restando mérito a estos artistas, todos ellos con una obra destacada e importante en su ramo. Pero estamos hablando de una feria del libro. ¿Acaso no hay escritores, editores, promotores de la lectura, maestros de literatura que merezcan esos reconocimientos?
Ahora salen los especialistas a decir que, si se bajan los sueldos a los funcionarios públicos, poniendo como tope los 108 mil pesos mensuales que piensa ganar López Obrador, entonces esos funcionarios inconformes migrarán a la iniciativa privada o a otros países. Lo único que les podemos decir es: «¡Por favor, cierren la puerta cuando salgan!».
Si alguien se la rifó con López Obrador desde hace muchos lustros, esa ha sido la maestra Gloria Sánchez. Esta luchadora de la izquierda real siempre estuvo en el frente, incluso en esos días en que los lopezobradoristas eran considerados una escoria en este país. Todavía recuerdo las reuniones que llevaba a cabo enfrente de la facultad de Economía, en una casa modesta donde se reunía con hombres y mujeres con ideales, con deseos de un cambio verdadero en este país.
El clamor de justicia en Veracruz no es capricho del gobernador, no es un asunto menor, son miles de millones de veracruzanos que claman justicia por el saqueo, los asesinatos, las extorciones, el daño a los adultos mayores, a los niños, a los enfermos; el clamor por justicia en Veracruz no es una venganza, no debería serlo. El clamor por justicia en Veracruz debería ser un acto congruente, un acto que legitime aún más al próximo gobernador. El clamor de justicia en Veracruz no es negociable.
El sepulturero del PRI se da ánimo él solo; el solitario de Los Pinos vive su propia realidad. Para Enrique peña Nieto, su realidad, su verdad es lo único que le hace compañía. Los reflectores están en una casa de la colonia Roma. De sus yerros quiere hacer fiesta; el enterrador presidencial quiere convertir en logros sus más grandes fracasos.
Quienes piensen que la maestra Elba Esther Gordillo es un cadáver político, están muy equivocados. Ella vuelve y viene con fuerza. El movimiento en su departamento de Polanco no es normal, es ahí donde se parte el queso. El cerebro donde surgen la idea de renovación o refundación del SNTE sale de ahí. La victoria de Andrés Manuel López Obrador es el mejor escenario que la Maestra pudo desear. Muchos analistas y sesudos de la política mexicana aseguran que se prepara para arrebatarle el control del SNTE a su pupilo Juan Díaz de la Torre.
Ahora resulta que la Iglesia Católica, esa que se ha aliado con el poder en los últimos sexenios, la iglesia de Norberto Rivera y del padre Maciel, la iglesia de Onésimo Cepeda y de Juan Sandoval Íñiguez le pide a Andrés Manuel López Obrador que no se ponga a Olga Sánchez Cordero en la Secretaria de Gobernación, pues se sabe, según ellos, que la exministra es promotora de la legalización de la mariguana, de los matrimonios gay y del aborto.