Desde que dio inicio la administración de Cuitláhuac García en Veracruz, varios medios, incluido Libertad bajo Palabra, le han dado puntual seguimiento a las acciones de este gobierno con la firme intención de mantener informada a la sociedad veracruzana y de todo el país. Se denunció que el propio gobernador estaba violando la ley al poner en Finanzas a su primo-hermano, Eleazar Guerrero, como el verdadero operador de los recursos estatales. Desde luego que, en el colmo del cinismo y la mentira, el hijo del profe Atanasio lo negó frente al propio presidente, Andrés Manuel López Obrador. Claro que se le demostró su mentira con un contundente reportaje.
Por eso, no nos sorprende que ahora nos enteremos de las triquiñuelas que Aldo Valerio Zamudio, personaje que desempeñaba muy bien su trabajo como cadenero antes de ser el coordinador de Comunicación Social del Congreso del Estado de Veracruz. Desde inicio de sus funciones, se denunció su falta de conocimiento del tema de comunicación, lo curioso de todo es que la cloaca la destapó un miembro de su propio partido.
Nos referimos al diputado José Magdaleno Rosales Torres, personaje tosco, brusco y que respingó cuando supo que se había filtrado que su hijo estaba en nómina del Congreso. Lo cierto es que no es nuevo que se sepa que el coordinador de Comunicación Social del Congreso del Estado de Veracruz trabaja para el pachuco bailarín de la SEV y, que si se queda en su puesto, será por obra y gracia de su protector Zenyazen Escobar, quien seguramente le hablará quedito al oído al que medio lleva las riendas en Veracruz.
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