El tiempo nos ha mostrado que el coronavirus no es cosa de juego, algunos pensaban que no acabaríamos como China, Estados Unidos, o Italia; creíamos que el virus era un invento del gobierno. Sin embargo, cuando el coronavirus llegó a México todos nos alertamos, las farmacias se quedaron sin cubrebocas, los productos de la canasta básica escasearon, por un momento sentimos que entre todos, como mexicanos, podíamos controlar la curva, pero esto claro no paso.
Pasadas las semanas del primer caso, los contagios aumentaron, de un caso pasamos a diez, de diez pasamos a cien y cuando menos nos dimos cuenta, pasamos de tener cien casos a 35 mil pacientes infectados de Covid-19. Semana tras semana el subsecretario de Salud Hugo López-Gatell, pedía que nos quedáramos en casa, pero sólo algunas personas acataban sus recomendaciones.
Hoy, de acuerdo a la Secretaria de Salud, el país alcanzó los 45 mil 032 casos de coronavirus confirmados, con 4 mil 767 muertes oficiales. No obstante, lo que más preocupa de esta situación es que nuestro país ha superado en muertes a China. En tan sólo cuatro meses, desde el primer caso en México, la nación supero al país chino de donde saliera el virus, pues en este sólo fallecieron 4 mil 633.
Lamentablemente México podría llegar a los 60 mil casos confirmados del virus o hasta más, si no se respeta y se llevan a cabo las recomendaciones emitidas por López-Gatell, pero eso sólo dependerá de las acciones que tomen o no los mexicanos.
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