Trascendió que se están alistando los argumentos para expulsar a Mario Marín del PRI. El exgobernador de Puebla es un prófugo de la justicia, pues la Fiscalía General de la República (FGR) tiene girada una orden de aprehensión en su contra por el delito de tortura en contra de la activista Lydia Cacho, quien denunciara a los amigos de Mario Marín como parte de una red de prostitución infantil. Por cierto, en los medios de comunicación a Mario Marín se le llama el “góber precioso”, ¿sabe usted por qué?
Resulta que, en febrero de 2006, hace 13 años, se dio a conocer una conversación telefónica entre el empresario Kamel Nacif y el entonces gobernador de Puebla Mario Marín. Nacif celebraba con Mario Marín que se hubiera detenido a Lydia Cacho, quien había acusado al empresario de formar parte de una red de pederastas. Mario Marín llama a su amigo, «Quiúbole, Kamel», el empresario entusiasmado le contesta, «Mi góber precioso». Marín lo halaga, «Mi héroe, chingao», Kamel le regresa el halago, «No, tú eres el héroe de esta película, papá».
Es entonces que Mario Marín se empina: «Pues ya ayer le acabé de darle un pinche coscorrón a esta vieja cabrona (Lydia Cacho). Le dije que aquí en Puebla se respeta la ley y no hay impunidad y quien comete un delito se llama delincuente. Y que no se quiera hacer la víctima y no quiera estar aprovechando para hacerse publicidad. Ya le mandé un mensaje a ver cómo nos contesta. Pero es que nos ha estado jode y jode, así que se lleve su coscorrón y que aprendan otros y otras».
La verdad es que esta magistral porquería llamada Mario Marín es un alacrán… A esta especie de lacra ponzoñosa es imposible calificarle como persona… Es una lástima que en México no exista la pena de muerte. Este hijo de la chingada sería idóneo candidato más a la silla eléctrica o, a aplastarle los huevos de un mazazo. Es el Hannibal Lecter de la depravación sexual.