Corren a Esteban Ramírez Zepeta como jefe de la Oficina de Gobierno; lo mandan al exilio como jefe de asesores. ¡Si robó, deberían consignarlo!
En el argot político ser jefe de asesores es una especie de exilio ignominioso que se otorga a alguien que te defraudó, pero que no puedes exhibir como corrupto porque te exhibes tú mismo. Tal vez por ello el gobernador Cuitláhuac García retiró a Esteban Ramírez Zepeta como jefe de la Oficina de Gobierno, un cargo poderoso, y lo nombró jefe de asesores, es decir, el exilio para alguien que defraudó tu confianza.
Ha trascendido que desde que llegó al puesto Ramírez Zepeta se puso a buscar cómo y dónde podía hacer negocio; y lo encontró. Se comenta que Ramírez Zepeta, fue relevado «por presuntas anomalías que lo involucra con contratos a empresas fantasmas». De ser ese el caso, Ramírez Zepeta debería ser entregado a las autoridades para que pague por los delitos que cometió como funcionario público.