Alguien en una ocasión dijo, y con mucha razón, que en política no existen casualidades, y es que resulta muy curioso que después de que el presidente Biden, sostuviera una llamada telefónica el martes pasado con el mandatario azteca, se haya tomado la decisión de reforzar con elementos de la Guardia Nacional (GN,) la frontera norte y sur del país. Desde luego que el presidente López Obrador ha señalado que esa decisión se tomó, no por la charla con el jefe de la Casa Blanca, sino que fue propia.
«No con él, no lo acordamos, nosotros tomamos la decisión. Reforzamiento (de la GN) pero llevan instrucción de no utilizar la fuerza. No tengo idea de cuántos elementos, pero sí decidimos de que se esté pendiente para evitar provocaciones; porque eso sí le dije al presidente Biden, que hay políticos en su país interesados, políticos es decir mucho, y tratarlos bien, son politiqueros, le dije políticos oportunistas, que quisieran que se produjera un conflicto en la frontera».
Pues mientras son peras o manzanas, el gobierno mexicano ya le está haciendo la chamba al gobierno de Estados Unidos. Pero eso sí, el presidente López Obrador dice que es por las buenas, es decir de cuates.
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