El día 15 de noviembre, una joven identificada como Monserrat Padilla hizo una denuncia por medio de sus redes sociales donde relató el espantoso momento que pasó cuando el chofer de un autobús no la quiso bajar en la parada indicada; ante la situación la joven tuvo que arrojarse de la unidad. La denunciante cuenta que a medida que se presentó el caso de Lidia Gabriela, la joven que se arrojó de un taxi por el miedo a sufrir un secuestro, es difícil andar tranquila por la ciudad y, al ver la situación, prefirió arrojarse de la unidad en movimiento, esto, sin importar que resultara lesionada.
Los hechos ocurrieron en una unidad de transporte público que circula el Periférico de la Ciudad de México y justo a la altura de Toreo la joven notó que el conductor, en lugar de frenar, aceleró. Con la denuncia añadió unas imágenes donde se ve las lesiones que sufrió tras la caída, en las fotografías se le ve el pie izquierdo inflamado y las manos con sangre.
De igual manera contó que después de la caída, la joven fue auxiliada por dos conductores que se percataron de lo sucedido: «Hoy tuve que saltar de un camión en Periférico, a la altura de Toreo, porque el chofer no me quería dejar bajar. Dos conductores se bajaron en ese instante para auxiliarme. Hoy salgo con buenos golpes pero viva. Cuántas no tienen esa suerte», anotó.
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