Claudia Sheinbaum ya se siente la sucesora, al menos ese fue el mensaje en su cuarto informe de gobierno

Dicen que para ser hay que parecer, ya que si no se es congruente entre lo que se proyecta y lo que se hace, puede hacer que disminuya la credibilidad de quien quiera parecer. Al menos así parece conducirse Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, quien ya se siente la próxima presidenta de México. Al menos ese fue el mensaje que mandó durante su cuarto informe de gobierno. Entre vítores y loas de los acarreados, la consentida del amo y señor de la 4T se dejó consentir con los gritos de «¡presidenta! ¡presidenta!»

Y es que para muchos especialistas y medios de comunicación, el presidente López Obrador ya no se pude desdecir de su pretensión de que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México sea su sucesora, muy a pesar de que Marcelo Ebrard tenga más aceptación entre la militancia dura y reacia como en los simpatizantes del canciller.

Por otro lado, no ha pasado desapercibido el trabajo del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien ha despertado simpatías entre morenistas y entre simpatizantes de otras fuerzas políticas. Por lo pronto, Claudia Sheinbaum ya se siente y se mira como la próxima presidenta de México. Al menos así se lo ha hecho creer su potentado y protector tabasqueño.