El dicho «piensa mal y acertarás», nos da a entender que las personas deben pensar con astucia y desconfiar de las cosas que lucen perfectas, especialmente de los ofrecimientos gratuitos y desmesurados. Y es que, resulta que Pío López Obrador, hermano del presidente de la República, acudió al INE a entregar una copia de la carpeta de investigación que la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales mantiene abierta en su contra y que se había negado a transparentar.
El hermano incómodo del presidente asegura que su deseo es que «se haga justicia». Es decir, ahora realizó una aportación voluntaria, supuestamente sin presiones de ningún tipo. Sin embargo, y seguramente aconsejado por sus abogados, entregó esos documentos como mera estrategia queriendo mandar un mensaje tardío del que nada debe, nada teme.
Lo cierto es que, se sabe que su carnal está molesto porque al asunto le han dado largas y no conviene que se alargue y se junte con las elecciones del Edomex y Coahuila. Así que no crea que es por otra cosa, lo que buscan es que ya se apague el asunto que les podría restar votos con el respetable electorado.
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