En la aldea Canich, en el municipio de Colotenango, Guatemala, una turba de personas linchó a tres sujetos por el asesinato de un menor de 11 años de edad. En los primeros reportes señalaron que a principios del mes de agosto secuestraron a un niño de 11 años cuando se dirigía a su escuela. Los delincuentes pidieron 100 mil Quetzales a los familiares para liberar al menor pero como no pudieron conseguir más que la mitad, asesinaron al niño y lo enterraron en una fosa de tres metros. Después de unos días, los mismos pobladores se reunieron y fueron tras los delincuentes. Una vez que los tuvieron amagados, los entregaron a la policía.
Cabe destacar que las autoridades en ningún momento fueron alertadas del secuestro, mucho menos del momento cuando los pobladores detuvieron a los secuestradores. La policía mantuvo a los secuestradores por varios días en los separos y al momento de ser trasladados a los jugados, una turba de personas los esperaba. Los pobladores les arrebataron a los secuestradores para lincharlos.
Los oficiales relataron que no pudieron hacer nada para resguardar a los detenidos, asimismo informaron que primero los golpearon para después rociarlos con gasolina y quemarlos. Si bien en estos casos no se puede detener a todos los responsables del linchamiento, las autoridades indicaron que hay fotografías de alguno de ellos y de ahí partirán con la investigación. Los pobladores recalcaron que ellos únicamente hicieron justicia por su propia mano.
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