Vergonzoso. Mario Mijares, rector del Colver, entrega maestría “patito” a Esteban Ramírez Zepeta y a Carlos Juárez, como si con eso se les quitara lo burro

Zepeta
Mario Mijares, rector del Colver, entrega maestría “patito” a Esteban Ramírez Zepeta y a Carlos Juárez FOTO: WEB

Señala un proverbio oriental que «un burro cargado de libros sigue siendo un burro», asimismo, una persona negada a la inteligencia, por más títulos que le regalen sigue siendo eso, un estulto. Es vergonzoso que el rector del Colegio de Veracruz, Mario Raúl Mijares, utilice esta institución para regalar títulos a diestra y siniestra. Grande es la molestia de los alumnos que cursaron alguna maestría o doctorado en el Colegio de Veracruz, aquellos que ocuparon buena parte de su tiempo tomar clases, para estudiar, para prepararse para los exámenes. Esos que finalmente lograron la meta de conseguir un título con mucho esfuerzo y sacrificio se encuentran muy molestos porque así, de la noche a la mañana, apareció Esteban Ramírez Zepeta, pidió un título de maestría sin cursarlo y el empleado de Atanasio García Durán se lo entregó sin pensarlo siquiera.

Vergonzoso que un sujeto como Ramírez Zepeta, quien aspira a ser el dirigente estatal de Morena, se vista de toga y birrete y se coloque en el lugar más discreto de un grupo de graduados para tomarse la foto, haciéndose pasar por graduado, cuando todos saben que el señor no asistió a clases. El otro que aprovechó la oferta de títulos “patito” fue Carlos Juárez, subsecretario de Gobierno, quien del mismo modo que Ramírez Zepeta nada más acudió a tomarse la foto con toga y birrete y con eso bastó para tener título de maestría por el Colver.

Vergonzoso que el Colver se preste a esa jugarreta indigna de una institución que ha formado a maestros y doctores de tanto prestigio. Y no sólo eso, mientras graduados con merecimiento esperan su título, a Ramírez Zepeta y a Carlos Juárez ya se los entregaron enmarcado, para que lo coloquen en la pared de su oficina. Piensa el aspirante a dirigente de Morena que, por arte de magia, una vez colocado el título ahí, dejará de ser estulto. Sí, ¡cómo no!

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *