¿Está usted enterado de lo que ocurre en el mundo? ¿Está actualizado sobre lo que está pasando en Colombia? Resulta que el actual presidente Iván Duque impulsó una impopular reforma tributaria que contempla alzas a la clase media del país. Ante esto se dieron las manifestaciones, pero todo se agravó. Días después la comunidad internacional denunció excesos de la fuerza pública en la represión de las manifestaciones estudiantiles, donde participan sindicatos, indígenas y otros sectores; salieron a las calles de las principales ciudades con marchas pacíficas. Tras una semana de movilizaciones, el gobierno no cedió al diálogo y comenzó la represión agresiva, fatal. En Colombia se vive uno de los peores momentos que ha tenido en la historia.
En Colombia la policía está asesinando civiles, mueren estudiantes mueren mujeres, muere la confianza de una nación. Ante el sometimiento que la población ha tenido, no se rinden y siguen de pie. Los colombianos se mantienen navegando en esa frase escrita por Nelson Mandela: “Soy el amo de mi destino. Soy el capitán de mi alma”. En los últimos días los manifestantes que resisten han colocado la bandera de Colombia al revés. ¿Por qué hacen esto?
Esto es un acto de crítica ante el significado de los colores. Cabe señalar que la bandera de Colombia tiene tres colores. El amarillo representa la abundancia y la riqueza del suelo, pero también la soberanía, la armonía y la justicia. El azul simboliza el mar, los dos océanos sobre los que Colombia tiene costas y que une a otros pueblos para el intercambio de productos. El rojo representa la sangre, pero no la sangre que derrama el odio sino la que alimenta el corazón y le da movimiento y vida, la que significa amor, poder, fuerza y progreso.
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