¿En qué país nos fue a meter la Cuarta Transformación? Ni en los peores años del priismo, ni en el sexenio de Fox o Calderón, el Instituto Nacional Electoral (INE) había sido tan sobajado como hasta ahora. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador es el verdadero responsable de esto. Si él dirige su dedo flamígero en contra de un medio, una persona o una institución, está dando la indicación a sus huestes hacia donde deben dirigir el ataque.
Ahora que el INE tiene nuevamente el caso de Salgado Macedonio en su cancha, la dirigencia de Morena no tiene empacho en amenazar al árbitro electoral. Es como en un partido de futbol donde un árbitro ha anulado un gol, los jugadores que se sienten perjudicados van y se lanzan con insultos y amenazas contra el árbitro, obligando a este a anular ese gol.
¿Qué clase de árbitro es? ¿Qué clase de jugadores son? Mario Delgado descaradamente les dice a los consejeros electorales: «Que INE mida consecuencias de sus acciones». Si el INE cede y devuelve candidatura a Salgado Macedonio, Morena sabrá que con amenazas el instituto electoral aflojará. Mejor sería que renunciaran.
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