Este gobernante no puede hilar un discurso, está peleado a muerte con la oratoria, nada más de escucharlo uno concluye que este personaje tiene analfabetismo funcional, ya que tiene fuertes problemas para hablar correctamente; tiene una incapacidad para utilizar su capacidad de lectura, escritura y cálculo de forma eficiente en las situaciones habituales de la vida. Pero eso no importaría en lo absoluto, si este gobernante tuviera una actitud más humana y humilde, como cuando no era diputado federal o gobernador de Veracruz. Los que viven en Veracruz conocen muy bien quién es Cuitláhuac García Jiménez, el hijo del Profe Atanasio.
De manera que por mucho que diga el Ejecutivo federal que le llena de orgullo, los oriundos de esta bendita tierra saben que con sus palabras lisonjeras, el presidente sólo remarca el alto grado de incapacidad para gobernar que ha tenido el hijo predilecto de la colonia Progreso de Xalapa. Sólo los incondicionales de la 4T se tragan el cuento de que el primer mandatario vino a cumplir con su agenda de trabajo, el pueblo veracruzano, al menos gran parte de él, sabe que el motivo de la visita de López Obrador fue apretar las tuercas y aceitar la maquinaria electoral de Morena para las elecciones del 6 de junio.
El presidente como ducho de lides electorales, sabe que no son momentos de regañar ni de cambios en el gabinete de la 4T jarocha, esos dependerán mucho de los resultados que entregue Cuitláhuac García, un hombre que lo llena de orgullo. Ya veremos si después del 6 de junio, el de Macuspana, Tabasco sigue opinando lo mismo.
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