La Fiscalía General del Estado (FGE), a cargo de Jorge Winckler Ortiz, sigue sin dotar las herramientas necesarias a madres para buscar a sus hijos en las fosas clandestinas que hay en Veracruz. María Magdalena Calte Hernández, madre de Alfredo Tlaxcalteco Calte, denunció que la FGE les entregó solamente varillas para las búsquedas correspondientes.
“Lo que nos dan es un peligro para los que buscamos, pues nos dan unas varillas, uno las mete y tiene que andarías oliendo, eso es un peligro para nuestro cuerpo”. La entrevistada indicó que existen aparatos especialistas que facilitan la búsqueda de osamentas en el suelo; sin embargo, cuestan un millón de pesos y, por ello, la fiscalía no puede proporcionarlo.
“Tanto dinero que se tira en otras cosas, yo sé que a los que nos duele es a los padres, porque las autoridades sí tienen hijos pero los tienen resguardados”. Por otra parte, denunció que ella y sus familiares han presentado pruebas a la autoridad sobre lo que le ocurrió a su hijo; sin embargo, las investigaciones no proceden.
Indicó que el vehículo donde viajaba su hijo el día que desapareció fue encontrado en Cardel. “La autoridad no hizo nada, al contrario, me pedían 15 mil pesos para poderlo resguardar, yo a esas alturas ya no tenía dinero, y por qué les voy a dar dinero yo, si soy la afectada”. Además, dijo que en Xalapa ha visto tres veces en circulación el automóvil que había comprado su hijo. “¿Su carro quién lo trae entonces?, no sé y tiene reporte de robo su carro, la autoridad de los autos robados hasta ahorita no hay hecho nada”. La mujer participó en la marcha que realizaron madres de desaparecidos del panteón Palo Verde al Monumento a la Madre.
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