– ¿Por qué me invitaste de tu pavo si sabías quién era?
– Pues porque me dije: esta ya viene, si le invito a lo mejor me da tiempo de comer un poco más.
– ¡Ah qué Macario! Nomás por eso me caíste bien.
Este es uno de los primeros diálogos que sostienen la muerte y Macario en la película Macario (1959), dirigida por Roberto Gavaldón e interpretada por uno de los mejores actores de este país, Ignacio López Tarso, la cual, además de haberse convertido en un referente del cine nacional, es también un homenaje a la fiesta del Día de Muertos.
Basada en la adaptación que B. Traven hiciera de un cuento de los Hermanos Grimm, relata la historia de un leñador pobre que se encuentra cara a cara con la muerte y que, después de hacerse amigos, él, Macario, hace todo para burlarla y no morir; fue la primera película mexicana nominada a un premio Oscar.
La fotografía estuvo a cargo de Gabriel Figueroa, quien a la fecha sigue siendo reconocido como uno de los mejores fotógrafos y quien marcó un antes y un después en la manera de hacer cine en México. Macario es nuestra recomendación para ver y disfrutar en estos días de muertos.
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