Ocurrieron 25 desapariciones durante gobierno de Yunes Linares, señala Colectivo Solecito

Francisco de Luna / Xalapa, Ver. Durante el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, han ocurrido 25 desapariciones, señala Lucía Díaz a través de la carta que envía de manera pública la integrante del Colectivo de Desaparecidos Solecito.

También le recalca al gobernador panista, «usted quiere hijos gobernadores, nosotras nos conformamos con saber de los nuestros».

Este comunicado lo hago como directora del Colectivo Solecito, refiere en el comunicado para responder a las declaraciones del mandatario estatal con relación al tema de las desapariciones.

Refiere que la Fiscalía General del Estado (FGE) no apoya en nada a los colectivos, «continúan las desapariciones en Veracruz. Ustedes se niegan a dar las cifras de las desapariciones. En el colectivo tenemos 25 casos de desapariciones durante su gobierno. Las cifras nos las han negado a nosotras y a la prensa. Verdad innegable».

Le remarca que la FGE tiene los casos abandonados «usted muestre minutas o siquiera fotos de trabajos y reuniones. No existen».

Como representante del Colectivo Solecito, indicó que el Fiscal repudia a los familiares de desaparecidos, «nos revictimiza, nos bloquea en redes, no tiene interlocución con nosotras. Ya lo demostramos. Usted trate de demostrar lo contrario».

También señaló que cuentan con las minutas de las reuniones que sostuvieron cuando Yunes Linares era candidato a la gubernatura por el estado de Veracruz. «Usted ofreció́ trabajar e implementar acciones múltiples que nos ayudarían a superar las deficiencias y obstáculos cuando usted se acercó́ a nosotras durante su campaña».

Entre esas propuestas era la de construir panteones ministeriales, ampliar la capacidad de servicios periciales, incrementar presupuestos para investigación, búsqueda e identificación.

En uno de los apartados, refiere «usted acusa que mi discurso está lleno de mentiras, así́, sin más pruebas ni argumentos. Quiero por este medio darle un repaso de mi discurso, un discurso que nace de la necesidad imperativa, dolorosa de encontrar a nuestros hijos, cosa que usted parece no comprender, quizás por la diferencia abismal entre sus necesidades familiares y las nuestras».