Xalapa, Ver. En un ambiente de camaradería, unidad y buenos deseos el contador Andrés Blancas Portilla, rector de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz encabezó el brindis navideño y de fin de año ante el personal de las diversas direcciones de esa institución de educación superior.
El rector de la UPAV destacó y agradeció el trabajo realizado por cada área en bien de aquellos veracruzanos que han confiado en la institución creada para llevar los programas universitarios a todo el territorio nacional.
Dijo que la labor de cada trabajador ha sido importante en los resultados obtenidos por la universidad a lo largo de este año, además de reconocer la tarea que el personal docente y directivo de cada sede ha desarrollado para ello, a todos les deseo una Navidad plena en donde la armonía, la unidad y el amor sean la constante en unión de sus seres queridos.
Recordó que se acerca un nuevo año en el que les pidió ser mejores personas, trabajadores y ciudadanos y que en el mismo tengan éxito personal y profesional, sin dejar de lado el realizar una mejor labor para mejorar el accionar de la institución.
Saludo de mano a cada empleado presente para los que tuvo palabras de aliento y en ocasiones bromeo con algunos de ellos, por lo que las carcajadas y las sonrisas no faltaron en ese emotivo momento en el que convivieron empleados del área administrativa con los del área de titulación, así como con los encargados de los programas educativos, del área de recursos materiales, financieros, de comunicación social y de preparatoria.
En medio de algo parecido a una romería conversaban, intercambiaban saludos y los buenos deseos por la celebración que se da en esta época, algunos se tomaban la consabida selfie para el Facebook o para el Whats App, los más buscaron la foto del recuerdo con el rector y con sus jefes de área.
Se puedo observar atuendos elegantes, otros más sencillos, pero todos con la alegría propia del momento. No podían faltar los canapés, bocadillos y sodas para el momento y así siguió la celebración y se formaron diversos corrillos en donde surgían de vez en vez sonoras carcajadas por las anécdotas contadas.
Y como lo que inicia debe terminar, llegó el momento en que los empleados fueron retirándose, no sin antes recibir la despedida por el rector Blancas Portilla y sus directores de área.
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