Para llamar la atención del mundo hay varias maneras. Unos buscan realizar proezas que van más allá de sus límites. Sin embargo, otros con llevar a cabo actos estúpidos consiguen llamar la atención. Tal es el caso de los activistas en contra del cambio climático, quienes para protestar por la poca atención que se le presta al tema, han decidido atacar “la belleza” de las obras de arte. Unas activistas lanzaron sopa de tomate sobre Los girasoles de Van Gogh, otros pure de papas a un cuadro de Monet. En esta ocasión, en los Países Bajos, activistas se fueron sobre el cuadro de Vermeer, La joven de la perla.
Uno de los activistas se puso pegamento en la cabeza para pegarse al cuadro. Mientras llevaban a cabo su atroz protesta uno de ellos arengó: «¿Cómo te sientes al ver algo tan bonito y valioso siendo aparentemente destrozado ante tus ojos? Nos sentimos indignados. Este cuadro está protegido por un cristal. Está bien, pero la gente vulnerable alrededor del planeta no está protegida. El futuro de nuestros hijos no está protegido. Las personas en extrema pobreza tienen que elegir entre calentarse o comer, y no están protegidos».
¿Y qué consiguieron? Sólo el repudio de la mayoría que entiende que agrediendo a la belleza no se protesta para proteger a la belleza. Afortunadamente al cuadro de Vermeer no le pasó nada, pues está protegido. Los activistas fueron llevados ante las autoridades para ser enjuiciados por vandalismo.
NOW – Attack on Johannes Vermeer’s famed «Girl with a Pearl Earring» painting at a museum in The Hague.pic.twitter.com/N9OgTEnYvb
— Disclose.tv (@disclosetv) October 27, 2022
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