Detienen a vocero de concesionarios de centros de verificación en manifestación; policías estatales no presentaron orden de aprehensión

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Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) detuvieron a Eduardo Mario Casares Sort de Sanz, vocero de la Unión de Concesionarios de Centros de Verificación, mientras participaba en una protesta y la toma de instalaciones de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) FOTO: JUAN DAVID CASTILLA
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Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) detuvieron a Eduardo Mario Casares Sort de Sanz, vocero de la Unión de Concesionarios de Centros de Verificación, mientras participaba en una protesta y la toma de instalaciones de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema).

Los hechos ocurrieron a las 9:47 horas de este martes 16 de marzo sobre la calle Francisco I. Madero, casi esquina con Benito Juárez, en pleno Centro Histórico de Xalapa.

Los quejosos habían colocado lonas sobre la fachada de la Sedema y se encontraban montando una carpa para su plantón indefinido.

Rodrigo Casares, hijo del representante de los concesionarios, denunció que este acto se trató de una detención ilegal, toda vez que los policías estatales no presentaron una orden de aprehensión.

Además, acusó que los servidores públicos usaron la fuerza contra el adulto mayor para someterlo, esposarlo y subirlo a una patrulla estatal.

Cabe mencionar que este joven, al intentar defender a su padre, fue sujetado del cuello y derribado al piso para que no interfiriera en la acción de los elementos de seguridad.

También una mujer de la tercera edad acabó en el piso cuando intentaba evitar que Eduardo Mario fuera esposado por los policías.

Casares Sort de Sans participó en una manifestación que inició a las 9:00 horas afuera de la dependencia estatal mencionada, para exigir que las autoridades ambientales les vendan los hologramas y así los centros de verificación puedan operar con normalidad.

Además, el pasado 9 de marzo participó en otra protesta frente a Palacio de Gobierno, donde los concesionarios de centros de verificación regalaron 2 mil huevos, como símbolo de que éstos le faltan a funcionarios estatales, y exigieron que no sean vistos como proveedores con contratos anuales por el gobierno, sino como titulares de una concesión por 50 años.

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