La Libertad de Expresión es criminal

- en Opinión

Zaira Rosas / Uno de los fallecidos héroes del internet, Aaron Swartz, decía: “La información es poder, pero como todo poder hay quienes quieren mantenerlo para sí mismos”, y justo el restringir el uso de una de nuestras herramientas principales de conocimiento y comunicación es una forma de empezar a coartar no sólo el poder sino la libertad de expresión que todo ciudadano debería tener.

El pasado martes 27 de octubre, el senador Omar Fayad presentó una “Iniciativa de ley federal para prevenir y sancionar los delitos informáticos”, la cual resulta tan absurda que castiga con 6 a 12 años de cárcel a quienes ejerzan la libertad de expresión, difundiendo algún meme incómodo, Mientras que los verdaderos criminales como quienes piratean tarjetas serían penalizados con 2 a 6 años.

De acuerdo al artículo 17 de la #LeyFayad, cualquiera que utilice su computadora o que ya no quiera utilizarla, estaría cometiendo un delito: “A todo aquel que dolosamente destruya, inutilice, dañe o realice cualquier acto que altere el funcionamiento de un sistema informático o alguno de sus componentes, se le impondrá una sanción de cinco a quince años de prisión y multa de hasta mil días de salario mínimo vigente.”

Igual de incoherente que el artículo anterior hay muchos, y otros que atentan contra el derecho de todo ciudadano de expresar su opinión, como el artículo 21, que  prohíbe cualquier agresión verbal o psicológica contra usuarios de internet. Lo anterior está escrito muy ambiguamente, porque si bien es cierto que el acoso virtual es un tema serio, toda persona que se sienta atacada podría ampararse bajo esta ley, imaginemos a los miles que critican al sistema de gobierno, a los periodistas que a veces señalamos de manera directa cuando algo nos parece irreal. Todo lo anterior sería un delito y de ser aprobada la ley ya no existirían los hash tags en los que se pide la renuncia de alguien o los memes que nos divierten día con día.

Podría seguir señalando errores de manera puntual con cada artículo, estoy segura que el 100% de quienes me leen estará de acuerdo en al menos una de mis críticas, porque todos somos usuarios de este medio que sin duda necesita regulaciones, pero bien pensadas y que la propuesta hecha en días pasados dista mucho de serlo.

Me parece un intento de criminalización de la expresión porque prohíbe divulgación de información que en muchos casos ha sido la que revele corrupción y atropellos contra la sociedad, de aprobarse una iniciativa como ésta personajes como Edward Snowden no podrían existir. En 2013 escribí un artículo titulado “La nueva liga de la justicia” en el cual mencioné la importancia que figuras como Julian Assange han tenido en nuestra época, son los que han puesto al descubierto crímenes contra los derechos humanos, espionaje que años atrás considerábamos irreal, pero las esferas de poder se sienten agredidas con estos hechos, ralentizan los procesos de información para controlarlos mejor.

El desarrollo de tecnologías nos ha colocado en un punto crítico, porque si bien internet podría ser el medio para una comunicación libre y sin censura, también es el mecanismo ideal para vigilar en tiempo real la totalidad de comunicaciones efectuadas. Existe una lucha constante por ver de qué lado se inclina la balanza. La necesidad de censurar surge de un temor a la difusión de ideas que puedan propiciar un cambio, para expertos en el tema como Andy Müller lo más peligroso para los gobiernos es “Que la gente tenga mejores ideas que sus políticas”.

Ante la propuesta de Fayad surgió la del conocido grupo de ciberactivistas, Anonymous, señalando que dicha ley atenta contra los derechos humanos y la libertad de expresión, además de que México no cuenta con las herramientas para hacerla valer. Por lo pronto el próximo 6 de noviembre habrá una nueva reunión en la que expertos como el Director de Red en Defensa de los Derechos Digitales harán ver el por qué la inviabilidad de la misma.

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