Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. El Estado de Veracruz es rehén de presiones externas y de «chantajes» políticos que provienen de las observaciones de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim) o de las recomendaciones de funcionarios de segunda de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Así lo consideró el vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, José Manuel Suazo Reyes, quien lamentó dicha situación.
En su comunicado dominical número 169, criticó que el pasado jueves 27 de julio haya sido presentada una iniciativa de decreto que busca reformar los artículos 149, 150 y 154 del Código Penal de Veracruz, para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas de gestación.
Esta iniciativa se contrapone con lo que actualmente establece el Artículo 4 de la Constitución del Estado de Veracruz.
«El Estado deberá garantizar el derecho a la vida del ser humano, desde el momento de la concepción hasta la muerte natural, como valor primordial que sustenta el ejercicio de los demás derechos. Este principio está en consonancia con los tratados internacionales que México ha firmado», se lee.
El Sacerdote consideró que algunos diputados están «orquestando un fraude constitucional», toda vez buscan modificar una ley menor en Veracruz y no ha sido modificada la Constitución.
«Es inaceptable e inconcebible que un servidor público que juró respetar la Constitución de Veracruz y hacerla valer, ahora con esta iniciativa se esté burlando de esta manera de la Carta Magna de los Veracruzanos. Percibimos además que quienes lanzan y apoyan esta iniciativa, en realidad están promoviendo más violencia en Veracruz pues con esta reforma se permitiría asesinar a los niños durante los 3 primeros meses de existencia».
A juicio de Suazo Reyes, se trata de una iniciativa cruel e inhumana, porque promueve que en Veracruz se siga derramando sangre. Más grave aún, porque se trata de sangre inocente, la sangre de seres humanos que no se pueden defender.
«Con esta iniciativa se pretende crear una ley que convertiría a una madre en asesina de su propio hijo. Por otra parte observamos que se está traicionando la voluntad popular. No deben olvidar los diputados que son representantes de los ciudadanos. Y que la gran mayoría de los ciudadanos ha votado por el respeto a la vida ¿A cuántas personas consultaron para hacer este tipo de iniciativas que sólo dividen a la población y distraen de los verdaderos problemas del Estado?.
El Director de la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Xalapa cree que los gobernantes no deberían permitir esta intromisión a la soberanía, bajo el pretexto de una “segunda alerta de género».
«Hacemos un llamado a los diputados para que defiendan y promuevan la vida en sus diferentes etapas. Que defiendan la soberanía de nuestro Estado y no se dejen intimidar por presiones externas o compromisos con grupos minoritarios. La mayoría de los veracruzanos amamos y respetamos la vida. Sí a la vida», culminó.
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