Jóvenes de la Generación Z marchan en CDMX contra la violencia. Policías de la SSC les bloquea acceso al Zócalo
Cientos de jóvenes autodenominados “Generación Z” marcharon en la Ciudad de México desde el Ángel de la Independencia hacia el Zócalo para exigir un alto a la violencia en el país, incluyendo la inseguridad, los asesinatos de activistas como el alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y demandas como la jornada laboral de 40 horas y apoyo a Palestina. Participaron organizaciones como el Frente por la Vivienda Joven, Asamblea Ecologista Popular y colectivos pro-Palestina, con un aforo estimado entre 300 y 1,500 personas, portando banderas inspiradas en el anime One Piece como símbolo de protesta global juvenil. La manifestación transcurrió pacíficamente por Paseo de la Reforma y Avenida Juárez, con consignas como “Ya basta de violencia” y críticas a la política de seguridad federal.
Sin embargo, al llegar a Eje Central y 5 de Mayo (cerca del Palacio de Bellas Artes), elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC-CDMX) encapsularon al contingente con más de 100 policías equipados con antidisturbios y 200 oficiales en total, impidiendo el avance al Zócalo por actividades culturales programadas en la plaza.
El supuesto combate al huachicol, que no es otra cosa que el robo de combustible a Pemex, iniciado por López Obrador al inicio de su sexenio, sólo sirvió para que los hijos del presidente se dieran cuenta del jugoso negocio que podrían tener en manos. El gobierno hizo creer a los mexicanos que el combate al robo de combustible era una prioridad nacional. Con esa excusa pusieron en manos de los marinos el cuidado de las aduanas y dejaron que buques enteros traficaran combustible, haciéndolo pasar como aceite de desecho. Después de siete años, el huachicol está más vivo que nunca. Reporta el periódico El Universal que en Agencia Reguladora del Transporte Ferroviariolos últimos seis años el huachicol transportado en trenes de carga se ha duplicado.
De acuerdo con el diccionario de la Real Academia Española «espurio significa falso o ilegítimo, es decir, que es engañoso, que degenera de su origen o naturaleza, o que carece de legitimidad». Esa es la definición exacta de Martín Aguilar Sánchez, un rector que degenera de su origen o naturaleza. Hasta este 9 de noviembre siete facultades de la Universidad Veracruzana (UV) se encuentran afectadas por un paro indefinido de actividades, concentrado principalmente en la Unidad Académica de Humanidades (UAH) en Xalapa, donde estudiantes mantienen tomada las instalaciones desde finales de octubre en solidaridad con la región Poza Rica-Tuxpan, afectada por inundaciones, y en exigencia de mejoras en protocolos de seguridad y diálogo con autoridades.
El tablero político en México se movió de forma repentina por la muerte violenta de Carlos Manzo, presidente municipal de Uruapan, Michoacán. La indignación inmediatamente rebasó al estado aguacatero y como una bola de nieve que cobró fuerza a nivel nacional, ahora amenaza al gobierno de Claudia Sheinbaum, quien ha quedado en la mente de los mexicanos, como el malo de la película. Si de algo debe preocupar al staff de alfiles de la 4T, es que la estafeta de traía Carlos Manzo, ahora ha quedado en manos de Grecia Quiroz, esposa del difunto líder.
Los que nos dedicamos a esto de la comunicación, ya sabemos cómo son las comparecencias de los funcionarios de un gobierno estatal. La mayoría de los encargados de despacho, como dice el diputado Esteban Bautista, acuden con la intención de engañar a los veracruzanos y por lo tanto se engañan a sí mismos. Es muy común que los acompañantes de los secretarios del gabinete lleven preguntas preparadas y se las pasen a diputados amigos para que se las hagan en la comparecencia; al llevar la respuesta preparada pretenden quedar como lumbreras.
Guillermo Zúñiga fue un fuera de serie. Con la Universidad Popular Autónoma de Veracruz el maestro creó un método de enseñanza que tuvo mucho éxito, que se replicó en otros estados, pero que fracasó; no tenían la visión de Zuñiga Martínez. La UPAV era una institución autosuficiente, que no dependía de los recursos que le entregaba el estado; de hecho el estado siempre le quedó a deber dinero a la UPAV. La base de UPAV era un patronato en donde se depositaban todas las cuotas que aportaban los alumnos que cursaban preparatoria o estudios universitarios.
Es evidente que Dante Delgado quedó muy mermado en su lucha contra el cáncer. Informan que al líder moral de Movimiento Ciudadano le quitaron el estómago por causa del cáncer y que le pusieron uno de cerdo, lo que alargaría un poco más su existencia. ¡Qué bueno! Sin embargo, es inocultable el deterioro de su persona. De hecho, quedó irreconocible. ¿A dónde fue a parar ese gesto adusto, severo, de pocos amigos que imponía y hasta daba miedo? En lugar de eso, y ante un rostro desvanecido, le colocaron en la cara una sonrisa que no va con él; un gesto que lo contradice, que no lo muestra alegre sino simple.