Sergio González Levet / Lo dice claramente la legislación estatal:
“Ley Número 231 Orgánica del Poder Judicial del Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave.
“Artículo 8.
“Las personas que hayan ocupado el cargo de Magistrada, Magistrado, Jueza o Juez, no podrán, dentro de los dos años siguientes a la fecha de su retiro, actuar como patronos, abogados o representantes en cualquier proceso ante los órganos del Poder Judicial.”
Eso quiere decir que Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, que hasta el día de hoy sigue cobrando sus jugosas quincenas como magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Veracruz (TSJ), no es elegible para ocupar el cargo de Fiscala General del Estado, como se ha venido manejando en varios medios de comunicación y en las inevitables redes sociales.
Tal vez se podría dar el caso extremo de que los diputados morenistas y sus aliados, que son mayoría en la LXVII Legislatura, recibieran la orden superior directa desde la oficina suroeste de Palacio de Gobierno y votaran para extender una dispensa de ley a la ex Presidenta del TSJ, y con eso pudiera la maestra tan cercana a la Gobernadora entrar a ejercer las delicadas funciones de procuración de justicia en bien, supuestamente, de todos los veracruzanos.
Pero la verdad es que la actual administración ha exagerado con el otorgamiento de excepciones a muchos funcionarios del Gobierno del Estado que no cumplen todos los requisitos que les exige particularmente la ley.
Pongamos por ejemplo el caso de los ciudadanos no nacidos en Veracruz que ocupan cargos que requieren la oriundez. No son nacidos en esta tierra el Secretario de Gobierno, Ricardo Ahued Bardahuil, que es del Estado de Hidalgo; el Secretario de Finanzas y Planeación, Miguel Santiago Reyes Hernández, poblano de corazón (¡yajajay!); el Secretario de Seguridad Pública, Alfonso Reyes Garcés, cuyo origen es un secreto de Estado pues no aparece en ningún documento que hable de su trayectoria; el Secretario de Infraestructura y Obras Públicas, Leonardo Cornejo Serrano, nacido en Salvatierra, Guanajuato; la Secretaria de Protección Civil, Guadalupe Osorno Maldonado, que vio la primera luz en Apizaco, Tlaxcala; La Secretaria de Educación de Veracruz, Claudia Tello Espinoza, que también guarda en varios cofres con llave el secreto de su lugar de nacimiento.
Así que como Lisbeth Aurelia no puede ser legalmente Fiscala, la ingeniera va tener que buscar otra persona, y ya casi la encuentra en Diego Castañeda, que ése sí cumple todos los requisitos.

