Hoy su permanencia está en la tablita y en manos de la nueva gobernadora, las peticiones de madres buscadoras pidiendo su renuncia no son poca cosa y resultan el pretexto perfecto para que se le pida su renuncia, aunque lo más justo sería que se le investigara profundamente.
Tenga la seguridad que muchos muertos saldrán del closet de la Fiscalía veracruzana. Por lo pronto, la gobernadora de Veracruz no requirió de su presencia en la reunión que esta sostuvo con madres de personas desaparecidas. Si Hernández Giadans, tiene un poco de sentido común, sabrá que sus días frente a la Fiscalía veracruzana, están contados. Sobre aviso, no hay engaño.