En Chilpancingo, Guerrero, sede de los poderes del Estado, los normalistas de Ayotzinapa no salieron a las calles a ver el eclipse solar. Los normalistas llegaron en varios autobuses, un día después de cumplirse un mes del asesinato del joven normalista Yanqui Kothan Gómez Peralta. El joven asesinado había salido a una fiesta cuando él y otros normalistas fueron detenidos por policías de Guerrero. En un principio se dijo que los normalistas dispararon a los policías y por ello los policías habían contratacado. Esta versión la sostuvo el jefe de la policía, así como el secretario de Gobierno. Al final resultó que los normalistas no llevaban armas.
Esto ocurrió el día 7 de marzo de 2024. Un día después, de acuerdo con los reportes periodísticos los normalistas llegaron y lanzaron petardos, rompieron cristales e incendiaron autos. Hubo fuego en el interior del palacio de gobierno y en el exterior los autos incendiados levantaban una alta nube de humo.
El día 28 de mayo de 2018, el candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador prometió: «Vamos a que se conozca todo, no quiero, ni deseo, ni conviene a ustedes que viven aquí en Iguala, que cuando se hace referencia a Iguala se esté pensando en los desaparecidos, se esté pensando en el dolor, no, el pueblo de Iguala, el pueblo de Guerrero, el pueblo de México no merece eso». Pero esa promesa no se ha cumplido y los normalistas no van a parar hasta que se las cumplan.
Guerrero enfrenta disturbios: Normalistas de Ayotzinapa atacan el Palacio de Gobierno mientras la gobernadora está ausente pic.twitter.com/eP3kCfIqri
— Enrique Muñoz (@enriquemunozFM) April 8, 2024
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