Ricardo Salinas Pliego retó al presidente López Obrador a una entrevista franca y honesta. El tema de la entrevista surge a raíz de las declaraciones del presidente López Obrador, quien dijo que los dueños de los medios no hacen entrevistas, y entre esos dueños anotó al dueño de TV Azteca. Salinas Pliego de inmediato invitó a su amigo a una entrevista, para demostrar que él sí hace entrevistas. ¿Aceptó el reto el presidente? ¡Claro que no! El presidente López Obrador sólo se dejaría entrevistar por periodistas de la calaña de Lord Molécula, de los moneros que comen paella con él en palacio o de los amanuenses que lo ven desnudo pero que le juran que el traje le luce impecable.
Contestó de esta manera el presidente: «Decirle a Ricardo que yo no puedo que me entreviste porque hay un asunto en el Poder Judicial que tiene que ver con los impuestos, y es mejor que pase eso y luego hablamos». En realidad, el litigio de impuestos que carga el empresario no fue la excusa, la verdadera razón por la que López Obrador no se dejó entrevistar fue por su cobardía, por el miedo que le tiene a la verdad.
Ante la negativa de dejarse entrevistar por él, Salinas Pliego le exigió al presidente una disculpa pública: «Ya que mi amigo López Obrador le saco la vuelta al asunto de la entrevista, espero que se me ofrezca una disculpa pública ya que YO NUNCA he sido un cobarde, agachón de los que ‘callan como momias’ ante la corrupción, la violencia y la falta de resultados de los gobiernícolas».
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