La que siempre se ufanaba de que tenía el pleno control de su estado, era la gobernadora de Campeche, la morenista Layda Sansores. Sin embargo, su falta de sensibilidad política y su cerrazón y terquedad de querer hacer las cosas a la vieja usanza priísta, la han colocado en un callejón sin salida, por el conflicto con la policía de su estado. El error principal de esta extravagante funcionaria, fue haber subestimado el poder de organización de los cuerpos policiacos. Layda Sansores sigue empecinada en conservar en el puesto a la secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) de Campeche, Marcela Muñoz Martínez.
«Es capricho pedir la destitución de esta funcionaria», ha señalado la gobernadora Layda Sansores San Román. No obstante, las protestas en contra de su gobierno de parte de los cuerpos policiacos siguen, al grado de que ya van tres marchas que se realizan y al parecer la campechana no tendrá otra alternativa que deponer del puesto a Marcela Muñoz Martínez.
Lo cierto es que los cuerpos policiacos en ese estado, trabajan y tienen malas condiciones de vida, eso sin contar que sus derechos más elementales no son respetados. Por lo pronto, Layda Sansores ya ha sido conminado desde palacio nacional a que le baje dos rayitas a su actitud, sobre todo cuando vieron un video, pidiendo voto de castigo para Morena.
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