No, pues que, a toda madre, quedar bien con sombrero ajeno. Resulta que el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el gobierno de México entregará apoyos a migrantes colombianos y ecuatorianos, así como ocurre con Venezuela. Resulta que, al ejecutivo federal, ya le gustó dilapidar los recursos de los mexicanos, ya que, en la mañanera de este martes, el vocero de Presidencia, Jesús Ramírez, explicó que «va a pasar lo mismo que con Venezuela, pero todavía falta concretar el convenio». Por su parte, el presidente señaló que no se ha fijado la cantidad del apoyo, pero dijo que será similar a los 110 dólares mensuales durante medio año, que se entregan a los venezolanos que aceptan regresar a ese país sudamericano.
«Se va a entregar este apoyo, no sé exactamente la cantidad, pero va a ser igual y nosotros estamos dispuestos a apoyar en esto, porque nos ayuda a que no tengamos tanto flujo migratorio, lo tenemos que hacer y se va avanzando».
Tal parece que no hay nadie, ni el congreso, que le ponga un alto al presidente, para que deje de derrochar los recursos económicos, que bien se pueden aplicar en el área de educación o de salud. Ni hablar, como el dinero no sale de sus bolsillos, se le hace fácil ser candil de la calle y oscuridad de su casa.
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