En Matamoros, Tamaulipas la guerra del narcotráfico ha dejado decenas de personas inocentes sin vida. Los enfrentamientos entre cárteles han dejado daños colaterales entre personas civiles. El 5 de febrero ocurrió uno de los ataques más fuertes entre células delictivas. Al parecer, un grupo conocido como “Los Metros” y “Los Toros”, que operan en Reynosa entraron en el municipio de Río Bravo con el objetivo de combatir a un grupo que opera en el municipio llamados “Los Escorpiones”. En ese ataque armado un agricultor resultó gravemente lesionado por una bala perdida.
Tras los enfrentamientos en distintas partes de Reynosa y Matamoros, Tamaulipas las autoridades desplegaron operativos por las zonas calientes. La Fiscalía de Matamoros informó que uno de los líderes de “Los Escorpiones”, brazo armado del Cártel del Golfo, había sido detenido por elementos del Ejército Mexicano.
El sujeto fue identificado como Diego Alonzo “N”, presunto líder de la célula delictiva que opera en el municipio de Río Bravo. Diego Alonzo tenía bajo su mando a una gran cantidad de sicarios dispuestos a luchar por la plaza. Uno de los objetivos de Diego era mantener la pelea contra “Los Metros”, y “Los Toros”.
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