El 2023 se aleja en un marco de violencia desmedida en México, en gran parte del territorio nacional hay muestra de que el crimen organizado ha permeado a los gobiernos de los tres niveles. Al menos en el Estado de México, donde gobierna la morenista Delfina Gómez, quedó constancia de que el estado y el ejército, tenían conocimiento de que los campesinos eran extorsionados por integrantes de la familia michoacana y los dejaron a su santa suerte.
En Morelos donde gobierna el exfutbolista Cuauhtémoc Blanco, el cobro de piso a los empresarios de todo nivel esta a la orden del día. En Veracruz, no hay día que haya muertos en la zona centro del estado, sobre todo en Córdoba y Ciudad Mendoza. En Zacatecas David Monreal ha sido rebasado por los malandros y estos se pasean con cinismo por sus propias narices.
Sin embargo, en contraste con la dura realidad que viven miles de familias mexicanas, para el presidente López Obrador, esta son pequeñeces. Par el ejecutivo federal, la nación pasa por sus mejores momentos. Los malos augurios y malas noticias, solo son combustible para atacar a su gobierno. Solo son pretextos que utiliza la clase conservadora. De ese tamaño es el cinismo de este señor.
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