El cinismo de López Obrador no tiene parangón. En su conferencia mañanera el presidente sacó su pañuelito blanco para demostrar que en su gobierno no hay corrupción. Lo dice unos días después de que se metiera a la cárcel al administrador de Segalmex. Lo dice el día que nos enteramos que los amigos de Andy López Beltrán han seguido haciendo negocios en lo oscurito al amparo del poder de su padre. Mexicanos Contra la Corrupción (MCCI) revela que antes de que se pusiera la primera piedra de la obra del aeropuerto de Tulum, Amílcar Olán, el amigo de Andy, compró 18 hectáreas de un terreno contiguo.
El terreno fue comprado en 6 pesos el metro cuadrado, cuando el precio estaba en 1,200 pesos el metro cuadrado. Señala MCCI: «La escritura que obtuvo @MXvsCORRUPCION indica que el terreno de 180 mil m2 fue adquirido seis días después del comienzo del gobierno del presidente López Obrador. Amílcar Olán compró dicho terreno a Salvador Juárez López, quien es dueño de Transportadora Nicole, una empresa que durante este sexenio se ha convertido en un exitoso subcontratista entre proveedores de Pemex como Baker Hughes, Schlumberger y GSM Bronco».
Ah, pero el presidente de México no nada de malo que los amigos de sus hijos se hagan ricos de la noche a la mañana. Y para echárnoslo en cara todavía levanta su pañuelito blanco. No por nada cínico viene de perro. Para más información siga este enlace: https://contralacorrupcion.mx/amigo-de-andy-hace-negocio-millonario-en-dos-bocas/
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