Poder Judicial pobre, pero Presidenta con lujo y dispendio

Aurelia
Cuitláhuac García Jiménez Lisbeth Aurelia Jiménez FOTO: WEB
- en Opinión

Arturo Reyes Isidoro / Seguramente la titular del Poder Judicial del estado, Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, está sufriendo mucho frío y no solo por las bajas temperaturas propias del clima de Xalapa en esta temporada, sino también porque quedó descobijada con la salida de su protector el exsecretario de Gobierno, Eric Cisneros.

A raíz de la salida del “afrodescendiente”, quienes viven en el área de su domicilio no dejaron de notar cómo de diez camionetas con guarros que permanecían afuera de su casa, se supone que resguardándola, así como su propiedad, se redujeron a solo dos unidades.

¿O acaso lo que cuidaban los que se fueron era la camioneta de súper lujo que recién adquirió la señora o señorita, con un costo de un millón 800 mil pesos, que ella dice a quienes la critican que no exageren porque hay más caras?

La funcionaria judicial es el más vivo ejemplo de la contradicción y la hipocresía del gobierno de la cuatroté, que proclama austeridad republicana y pobreza franciscana pero cuyos integrantes viven en el lujo y en el dispendio con cargo a los contribuyentes, ofensivo para los pobres, que según ellos son primero.

Desde que se le vio estrenando y montada en la súper camioneta se desató la polémica y ella intentó salir al paso. Así, el pasado 29 de noviembre dijo a los reporteros: “Considero que no es ningún lujo porque al final del día es un tema de seguridad, sobre todo, y el tema de que se viaja muchísimo; yo en lo personal recorro todo el estado”.

¡Caray! ¿Pues cuánto está acostumbrada a gastar, cuál es su nivel socioeconómico, con cuánto vive a diario que le parece poco un millón 800 mil pesos, ya tirándole a 2 millones?, pues dijo a reporteros del puerto jarocho que no es cierto que la unidad costó 2 millones de pesos, ya que no es la más lujosa, sino “tipo intermedia… tengo noción, creo que costó un millón 600”.

¿Pues no que el Poder Judicial estaba en quiebra?

En 2021 se desató un verdadero escándalo cuando la entonces presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Isabel Romero Cruz, anunció que había un déficit de 500 millones de pesos para terminar el segundo semestre de ese año, de los cuales 260 millones eran para el pago de nómina y de gastos operativos.

La crisis la causó también una mala administración, como lo confirmó el secretario de Finanzas del gobierno, José Luis Lima Franco, quien comentó que no habían hecho una buena distribución o administración de los recursos y que se habían acabado el presupuesto anual en julio, por lo que de agosto a diciembre ya no tenían dinero para pagar la nómina (la administradora era la célebre Joana Marlen Bautista Flores, a la que quién sabe por qué intereses no se le ha investigado).

Debido a ese déficit se extinguieron 29 juzgados y se les recortó su compensación y su salario en 30 por ciento a 31 de 35 magistrados, lo que aceptaron en medio de protestas de inconformidad.

Por lo que ahora se advierte, debido a la ostentación de la actual presidenta, Aurelia Jiménez, la difícil situación del Poder Judicial es cosa del pasado y ahora hay tanto dinero incluso para comprarse una camioneta Suburban de súper lujo.

El 29 de noviembre pasado, la reportera Isabel Ortega, del portal La Silla Rota Veracruz, publicó que hizo una solicitud de información y se le informó que la unidad se importó de Estados Unidos y tuvo un costo de un millón 812 mil pesos.

¿Dónde está la oposición? Ya se va viendo ahora

Luego que la oposición PRI-PAN en Nuevo León por mero deja sin gubernatura a Samuel García y provocó también, aunque en forma indirecta, su caída como candidato presidencial, Leo Zuckermann, en su artículo del lunes en Excelsior comentó que para los que preguntaban dónde está la oposición en México, “ya la vimos presente”.

Lo recordé ayer cuando el dirigente estatal del PRI, Adolfo Ramírez Arana, denunció en el OPLE a Rocío Nahle, coordinadora de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación por el uso de recursos públicos para favorecer a la candidata presidencial Claudia Sheinbaum, en un mitin que tuvo lugar en Ángel R. Cabada.

La zacatecana cometió el error de hablar de movilización de personas ante los medios y hay imágenes donde se ve cómo baja gente de un vehículo con el logotipo del ayuntamiento y se dirigen al acto, en una clara violación a la ley.

Ramírez Arana dijo también que hubo lugares en el sur del estado en los que suspendieron las clases para que los maestros, obligados o por su voluntad, pudieran asistir al mitin.

Entonces, replicando a Zuckermann, para los que preguntan, en el caso del estado, dónde está la oposición, la acabamos de ver presente: vigilante, atenta a registrar cualquier error que cometa la señora Nahle, documentando cualquier anomalía o infracción a la ley en forma debida para llevar su denuncia ante los tribunales federales, porque se da por anticipado que en el tribunal estatal se harán de la vista gorda y desecharán cualquier denuncia de la oposición.

Por eso se habría abierto también Manuel Huerta

Luego de que ayer comenté que se notaba un alejamiento de Manuel Huerta de Rocío Nahle, una persona informada me comentó que había también otra causa: por los gastos de campaña, porque si se presenta en los actos masivos, con acarreados, le cargarán la parte proporcional que le corresponda y se puede ver limitado para usar recursos cuando verdaderamente los necesite.

Manuel es un viejo zorro político, como que manejó el proceso electoral de su partido hace seis años, y sabe bien la sanción a la que se puede enfrentar si rebasa el límite legal, incluso hasta que los tribunales le quiten un triunfo.

Es obvio que ni Rocío ni quienes la acompañan en su equipo tienen experiencia ni conocen la ley electoral, y que no tiene un experto legal que la asesore y la alerte. La denuncia de ayer en su contra, con pruebas, es ya una piedrita, por ahora, en sus zapatos.

Álvarez Fontán se inscribe para buscar diputación local

Dice un dicho que no hay peor lucha que la que no se hace, y otro, que el que persevera alcanza.

Aplica muy bien al exdirector (antes delegado) de la SICT Ramón Álvarez Fontán, quien se inscribió ayer en el proceso interno de Morena para buscar la candidatura a la diputación local por el Distrito 14 con cabecera en el puerto de Veracruz.

El exfuncionario federal tiene meses recorriendo calles y colonias de su distrito, tocando puertas casa por casa, escuchando a sus potenciales representados para, con su experiencia, integrar programas de apoyo y gestionar recursos para ayudar a resolver problemas y carencias que se viven en su distrito.

Ayer, en conferencia de prensa recordó que tiene mucha experiencia en la función pública, lo que por la radiografía que tiene del distrito, puede aportar al bienestar de los jarochos. “Tengo la capacidad y la convicción”, afirmó.

Cabe destacar que el empresario, cuenta con una amplia experiencia en la función pública federal, pues fue director de la Secretaría de Comunicación y Transportes, razón por la cual precisó que es una de las zonas en las que hace falta obra pública e infraestructura. “Por la experiencia que he tenido en la función pública, y el conocimiento de

nuestro municipio, siento que tengo la responsabilidad de aportar más directamente al bienestar de los jarochos, porque tengo la capacidad y la convicción”, señaló el empresario, quien además se declaró obradorista.

Preguntado sobre su rol como empresario, dijo que “alguien que quiere contribuir con un granito de arena para el bienestar de México y que siga la Cuarta Transformación, debe ser bienvenido”.

Agradecimiento personal

Publiqué ayer en mi cuenta de Facebook: “En circunstancias así, es imposible que no lo embarguen a uno las emociones. Este miércoles (06.12.23) mis compañeros de la Editorial de la UV me sorprendieron con un convivio-desayuno para despedirme por mi jubilación. El director, Agustín del Moral, me entregó un testimonio de reconocimiento a nombre y con el nombre de todo el personal, mis compañeros por muchos años. Antes de llegar a la Editorial, y al periodismo, fui mil usos (para recordar aquel personaje que encarnaba Héctor Suárez), desde que empecé a trabajar a los 14 años como secretario taquimecanógrafo en Coatzacoalcos. Por necesidad estudié en escuelas nocturnas, para trabajadores, que entonces existían. Sesenta años después de trabajo diario puedo decir que la vida, que Dios me iluminó y me ha dado más de lo que tal vez merezco. Continuaré en mi tarea periodística. ‘Querido Arturo: Tus valores y acciones son un ejemplo para toda la comunidad universitaria. Compromiso, seriedad, respeto, disciplina, solidaridad son parte de la impronta humanista que te reconocemos. Te deseamos buenos momentos en los caminos que emprendas. Gracias por todo’, me dijeron mis compañeros y se los agradezco”.

Desde este espacio doy gracias a tantas personas que tuvieron a bien enviarme mensajes de amistad por ese motivo, lo mismo por las redes sociales que en forma directa o a través de mis familiares, así como también a quienes replicaron mi comentario y a algunos compañeros que lo incluyeron en sus espacios informativos. A todas, a todos, muchas gracias.

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