Cuitláhuac García dejó que el Bola 8 se empoderara, dejó que robara y dejó que huyera con impunidad. ¿Dónde están los millones que PEMEX entregó al Bola 8?

Bola
Cuitláhuac García JIménez y Éric Patrocinio Cisneros Burgos (el Bola 8) FOTO: WEB
- en Avenida Principal, Carrusel

El Bola 8 se empoderó en el estado de Veracruz gracias a las omisiones y complacencias del gobernador Cuitláhuac García. En LBP siempre nos preguntamos, ¿qué le sabía el Bola 8 al gobernador como para que éste lo dejara hacer y deshacer en el estado? ¿Lo tendría grabado en posiciones indecentes? No sabemos. Lo que sí sabemos es lo que declaró Elio Hernández Gutiérrez, secretario de Infraestructura y Obras Públicas.

En su columna Prosa Aprisa Arturo Reyes Isidoro hace una reseña puntual: «Espoleado por algunos diputados sobre el manejo de donaciones millonarias de Pemex al gobierno de Veracruz, no dudó en deslindarse y deslindar a su dependencia y confesar que el manejo lo hizo la Secretaría de Gobierno cuando su titular era Cisneros. Fue una revelación y una denuncia grave que salpica al gobierno al que sirve. De siempre, históricamente, al menos en el gobierno de Veracruz, esas donaciones, consistentes en combustible para vehículos y asfalto, del llamado AC20, las ha manejado el área técnica-mecánica, o sea, lo que ahora se conoce como SIOP. Si “Patochi” se apropió del manejo en forma indebida fue simple y sencillamente porque el gobernador Cuitláhuac García Jiménez lo permitió, mientras la contralora general del estado, Mercedes Santoyo Domínguez, seguía, como sigue, en calidad de florero».

El gobernador de Veracruz siempre se ha mostrado como una “mosquita muerta”. Sabe de los negocios del procurador del Medio Ambiente, Sergio Rodríguez y los solapa, porque dicen algunos allegados que él lleva su gran mochada. Por supuesto que el gobernador sabía de las transas del Bola 8, por supuesto que las solapó, por supuesto que también llevaba su gran mochada. Anota Reyes Isidoro: «Hoy Cisneros anda huyendo, pero el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, que proclama honestidad, tiene la obligación legal, ética y moral de ordenar una investigación e informarle al pueblo de Veracruz, en forma detallada, transparente, qué se hizo con y cómo se manejó ese recurso, más todavía cuando en más de una ocasión el presidente López Obrador ha salido en defensa del gobernador presumiendo que es una ‘gente honesta’».

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