Uno es imprudente, impulsivo y ambicioso. El otro es prudente, reflexivo y centrado. Samuel García, a pesar de que dijo que no dejaría el gobierno de Nuevo León para buscar la presidencia de México, ahí está encarrilado en una campaña llena de torpezas. Por su parte, Luis Donaldo Colosio, a quien le ofrecieron la candidatura de Movimiento Ciudadano a la presidencia, dijo que todavía no era su tiempo, que debía madurar políticamente. Uno dio muestras de su insensatez, el otro, del mismo partido, dio muestra de sensatez.
Pues Colosio Riojas, desde su escaño de prudencia advirtió: «Lo he dicho en otros foros, Samuel es un hombre muy ambicioso y esa ambición lo está haciendo tomar decisiones poco prudentes, movido por el hecho de que a muchas personas no les convencen las otras opciones para la presidencia de la república».
El mismo Colosio Riojas reconoce que Samuel García prometió, pero no cumplió, pues asegura que Nuevo León requiere de un gobernante que cumpla lo que promete; esto en alusión a Samuel García que juró no dejaría el gobierno de Nuevo León para irse de candidato. Y los dos son del mismo partido. Samuel le ha de decir a Colosio: «No me defiendas compadre».
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