Ahora nos enteramos, gracias a informes del Ejército y de la Asociación de Bancos de México, que el saqueo en la ciudad de Acapulco fue orquestado por el crimen organizado. El periodista Héctor de Mauleón nos revela que al menos dos grupos participaron en ese saqueo orquestado, el Cártel Independiente de Acapulco y el grupo de Los Rusos, que es brazo del Cártel de Sinaloa. Estos grupos, desde antes del huracán, llamaron a la población por radio para que se movilizara.
Dice De Mauleón: «Más de 20 sucursales (bancarias) fueron saqueadas en el puerto. En algunos casos, los cajeros automáticos fueron extraídos, o más exactamente arrancados, con cadenas que eran jaladas por camionetas. En varias sucursales, los criminales lograron llevarse la totalidad de los cajeros». Ahora los cárteles han tomado el control del combustible, del combustible que saquearon durante la rapiña.
Ahora, a plena luz del día, ofrecen la gasolina a 40 pesos el litro, ahora son llamados los “Huachicoleros del huracán”. Por supuesto, desde antes del huracán Otis el crimen organizado ya controlaba buena parte de los municipios de Guerrero. Ellos decidían quién y qué vendía en los mercados, se apoderaron de la distribución de productos básicos. Ahora con la tragedia ellos habrán de decidir, a pesar de la presencia del Ejército, a quién se le da el apoyo y a quién no.
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