Dicen las lenguas de doble filo, que las apuraciones que tenían en el Frente Amplio por México, sobre todo del PRI, para darle el espaldarazo a Xóchitl Gálvez, es por qué había informes fidedignos de que manos morenas, querían meterse en el proceso a favor de Beatriz Paredes, todo con la intención de descarrilar a Xóchitl Gálvez. Además de que las encuestas de Reforma y el estudio telefónico realizado por Wise, daban como favorita a la senadora del PAN.
Con este escenario, poniendo a la hidalguense a la cabeza del Frente Opositor, los planes del presidente López Obrador de repetir en el gobierno se tambalean. Es cierto que, el gobierno federal hará uso de los beneficios de los programas sociales y que fortalecerá el voto duro en los más de veinte estados donde gobierna Morena, sin embargo, no hay que olvidar que hay una clase media que pretende cobrárselas a este gobierno.
Eso sin tomar en cuenta, que hay una clase que se encuentra en el limbo y que no recibe ningún beneficio social. Por lo pronto, el Frente Amplio por México ya tiene candidata, y esa es Xóchitl Gálvez.
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