Francisco Vargas / El municipio de Lagos de Moreno, en el estado de Jalisco, es considerado por los cárteles de la droga, como uno de los puntos más valiosos para el tráfico de drogas desde México a Estados Unidos y viceversa para el tráfico de armas, esta ciudad (declarada patrimonio cultural de la nación) se encuentra en el punto medio de las carreteras que conectan Guadalajara con León, San Luis Potosí y Zacatecas, este último estado, sede de la batalla que libra el Cártel de Sinaloa contra el Cártel Jalisco Nueva Generación, por el control de la plaza.
Ismael “El Mayo” Zambada y Nemesio Oseguera Cervantes alías “El Mencho”, llevan al menos un par de años librando (literalmente) una guerra por el control de este territorio, que incluye ciudades de los estados de San Luis Potosí, Zacatecas, Guanajuato y ahora Jalisco.
Durante los años 2022 y 2021 fue común ver convoys de miembros del crimen organizado fuertemente armados circulando por los poblados de estos estados, así como vídeos de balaceras y de miembros de estos Cárteles ultimándose entre sí.
El poder del CJNG y del Cártel de Sinaloa escala a tal nivel de superar al grupo paramilitar ruso “grupo Wagner” contando en sus filas con 45 mil miembros con presencia en 100 países, según el informe más reciente de la DEA publicado el pasado 27 de julio de este año.
Para estas dos organizaciones criminales con este poder tanto bélico como económico, es muy fácil que en varias ocasiones superen a las fuerzas de seguridad locales y estatales, que desgraciadamente no siempre cuentan ni con la capacitación, armamento, infraestructura o salarios suficientes para hacerle frente a Cárteles tan poderosos sin el apoyo de las fuerzas federales.
Incluso en muchas de las carreteras del país, miembros de estos y otros demás cárteles del narco, mantienen el control de ellas, con el beneplácito u omisión de la Guardia Nacional, la cual es la que actualmente se encarga de la seguridad de estas, supliendo las labores de le extinta Policía Federal preventiva y de caminos.
La pregunta obligada aquí es la siguiente: ¿Cómo un grupo de jóvenes (casi adolescentes) de entre 18 y 22 años, terminaron siendo privados ilegalmente de su libertad para después ser ejecutados de la peor manera posible, con un grado de tortura perturbador?
Es decir, ¿Por qué asesinar de esa manera a un grupo jóvenes y amigos, que a todas luces eran inocentes?, ¿Por qué llegar a ese nivel de tortura y después exhibir lo que les hacen en un vídeo que buscaron hacer viral?
Probablemente estos cinco jóvenes pagaron por otros criminales, siendo confundidos, o sin mayor remordimiento los torturaron y ejecutaron de esa manera para enviar un mensaje a sus contrarios del cártel rival, conscientes de que se trataba de jóvenes completamente inocentes ajenos a cualquier actividad delictiva.
¿Cómo explican esto los infinitamente poderosos líderes de estos dos Cárteles, que, a palabras propias, mediante comunicados e incluso en sus propios narco corridos, aseguran no meterse con la población, ni ejecutar inocentes?
¿Ahora la población civil, inocente y ajena a cualquier actividad delictiva, tendremos que empezar a temer por nuestra integridad, a sabiendas que no importa si estamos relacionados o no con el mundo del narco?
Estamos solos, sin el apoyo de nadie y mucho menos de nuestro gobierno, que por órdenes de la máxima autoridad del país (el Presidente de la República), tiene oídos sordos y burlas sobre las cuestiones y reclamos de atrocidades como estas, un México sin pies ni cabeza, en las manos de nadie.
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