Ciudad de México. El mundo se mueve cada vez a un ritmo más acelerado impactando en todos los ámbitos. Estamos inmersos en nuestras ocupaciones que rara vez nos detenemos a pensar que será de nuestro futuro y cómo cubriremos nuestras necesidades económicas.
Para resolver este inconveniente, nacen los Fondos de Pensiones que son un sistema de Ahorro a largo plazo para el retiro. Una pensión es un pago corriente ya sea vitalicio o temporal que se le otorga un individuo que presenta dificultades para laborar y generar ingresos por cuenta propia. Este apoyo económico puede provenir de una institución privada o, como en la mayoría de los países de América Latina, un instituto de previsión los cuales ya tienen establecido que tipo de situaciones cubre su beneficio.
¿Cómo funciona un plan de pensiones?
Aunque existen instituciones privadas que manejan Fondos de Pensiones, ofreciendo una amplia gama de productos a sus clientes, Nos centraremos en las instituciones públicas a través de las cuales el grueso de la población accede a los servicios de previsión. Los Entes Públicos encargados de administrar los fondos de pensiones son los Institutos de previsión y seguridad social. Los trabajadores se afilian a ellos y comienzan a cotizar de forma inmediata.
La cotización se compone de dos partes, una aportada por el empleador y la otra por el empleado, las que van a una cuenta individual donde son administradas con la intención de generar beneficios y asegurar el financiamiento de nuestra pensión cuando finalice nuestra vida laboral.
Cabe mencionar que el valor de la pensión recibida dependerá del importe de los salarios percibidos y de las cuotas que hemos aportado a lo largo de nuestra vida laboral y regularmente no podremos acceder a ellos antes de que llegue ese momento a menos que se presenten las excepciones contempladas en las regulaciones de los fondos de pensiones.
Marco Legal de los planes de pensiones
Los Planes de pensiones están regulados por un marco legal y cuentan con cobertura estatal, que garantiza la protección de los cotizantes, procurando que el dinero de los aportantes no se ponga en riesgo, más aún, garantizando la inversión de estos con un buen margen de retorno.
Las regulaciones dependen de cada país, sin embargo, todas buscan los mismos objetivos y es asegurar la cobertura económica cuando un trabajador finalice su vida laboral independientemente de los motivos que los causen. Estas regulaciones han presentado reformas a lo largo de los años buscando mejorar el beneficio de sus afiliados.
México, por ejemplo, actualmente presenta un programa conocido como Modalidad 40 consistente en realizar aportaciones voluntarias con el fin de mejorar el salario y número de semanas cotizadas para lograr el aumento del valor de la pensión hasta en un 300% garantizando mejores condiciones de retiro. Este programa es exclusivo para los trabajadores que comenzaron a cotizar ante el IMSS antes del 1 de julio de 1997. Cabe mencionar que para acceder a este programa es necesario cumplir con ciertos requisitos.
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