En México y en otros países la “X” tiene una negativa carga semántica. Para muchos “X” es la marca de un error, aunque para otros es la marca del lugar en el que se encuentra el tesoro. En México ser “X” es ser insignificante, un cero a la izquierda, una persona gris e insustancial. Por ello, cambiar el nombre de Twitter a “X”, para muchos no parece buena idea. El pajarito de la red social es ya un icono de la comunicación global, en buena parte gracias a las revoluciones que se han forjado a su alrededor.
Por supuesto, Elon Musk es el propietario de la empresa y puede hacer de ella lo que se le pegue la gana. Ahora bien, el nombre no es lo único que cambiará. De acuerdo con medios informativos Elon Musk pretende que su plataforma esté más enfocada a audios y video, mensajería y banca digital «creando un mercado global para ideas, bienes, servicios y oportunidades». Una plataforma gobernada por la Inteligencia Artificial.
Estos cambios nos obligan a preguntar, ¿usted le confiaría sus ahorros a un robot de Inteligencia Artificial? Habrá que esperar a ver como se desarrollan esos cambios. Mientras tanto, para muchos cambiar al pajarito azul por una “X” es un error que merece, como diría Chabelo, una “espantosa X”.
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