Jorge Flores Martínez / No me queda claro cómo se va a resolver el proceso de selección de candidato del Frente Amplio Opositor, tengo muchas y muy serias dudas. Pero algo hay de luz, de primera impresión, parece un proceso más democrático que el de las denominadas “corcholatas”.
Es un hecho que en Palacio Nacional tienen opciones abiertas dependiendo del candidato que se decida en la oposición. Claudia Sheinbaum puede funcionar muy bien, ser mujer con una imagen de preparación científica y moderna le da sus buenos puntos. Creo que cualquier candidato varón de la oposición la tendría complicada, no sería fácil atacarla sin que ella se victimice como mujer y se revierta cualquier intención de desprestigiarla.
Adán Augusto es un caballo negro, solo lo tienen para crear el tercio y que entre Ebrard y Sheinbaum el daño no sea directo y absoluto. Tendrá una oportunidad si el candidato opositor resulta con mayores armas y Sheinbaum se desinfla. Ebrard no tiene la menor posibilidad, no representa nada en Palacio y solo lo mantienen con la esperanza de un proceso con piso parejo para todos. Pobre, cree que los acuerdos que tiene con López Obrador serán respetados. De Montiel y la pacotilla de Noroña no pienso perder mi tiempo ni el de ustedes. No son nada ni representan nada.
Lo que me llamó la atención es cómo aparece Xóchitl Gálvez en escena. Hasta hace un par de semanas no estaba en el radar de nadie. Se contemplaba como una candidata competitiva para la CDMX, para eso le alcanzaba. Pero como todo en política, todo es circunstancias. Un hecho no contemplado la sube a escena en el momento exacto; el amparo de derecho de réplica en la mañanera del presidente. Nadie sabe para quién trabaja, pero en fútbol, los errores defensivos por lo general son golazos.
Ahora tienen la candidata perfecta, tanto que la Sheinbaum pasa por fifí conservadora y neoliberal al lado de Xóchitl Gálvez. Tiene un origen indígena, de superación personal digno de una serie de Netflix y además es espontánea y dicharachera como el mismo López Obrador. Puedo asegurar que en Palacio Nacional no les gusta nada la idea. No tienen antídoto y la Sheinbaum no está protegida, por el contrario, se encuentra expuesta.
A mí en lo personal no me gusta del todo, pero estoy absolutamente convencido que será una candidata que les dará mil batallas y con un rango de ataque muy reducido. Encontrarle un flanco débil no será sencillo y si lo tiene, implementar el ataque sin que se revierta será una tarea de profesionales.
Puedo decirles algo, creo que si se concreta la candidatura de Xóchitl Gálvez, la Sheinbaum sale de escena y entra con todo Adán Augusto con toda la artillería pesada del estado a intimidar a cualquiera que asome la cabeza, tanto de la oposición como del mismo oficialismo.
Lo peor del caso, fue un enemigo que armaron desde el mismo Palacio Nacional. La hubieran destrozado si el presidente le hubiera dado el derecho de réplica en la mañanera. Insisto, cuando el juego está muy cerrado y competido, los goles, por lo regular, se hacen aprovechando pequeños e insignificantes errores defensivos.
Xóchitl Gálvez tiene la pelota en el área chica, el portero en el suelo y el marco abierto.
Pero también es prudente apuntar que muchos fallan y mandan la pelota a las gradas.
Twitter: @jorgeflores1mx
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