En la ciudad de Puerto Príncipe, Haití, las cosas se han salido de control y a pesar de que el gobierno informó sobre la implementación de más seguridad en ciertas comunidades, no se dan abasto con las bandas que operan en el lugar. Desde hace un tiempo, pobladores se han unido para intentar erradicar por sus propias manos estás bandas que desde hace años se han apoderado de Puerto Príncipe. Esta unión de civiles armados se les denomina “bwa kale”, que significa “madera pelada”.
Para algunos, el hecho de que la población esté unida y combatiendo a la delincuencia organizada es una buena señal, pues lo que la policía no puede hacer lo terminan haciendo los grupos de autodefensa. Sin embargo, la opinión de otros es distinta, pues indican que la violencia ha incrementado descomunalmente.
Los argumentos de los que no están de acuerdo con estos grupos de autodefensa es que en muchas ocasiones la población no se mide ni indaga si las víctimas en realidad son parte de una banda criminal, ellos agarran parejo. Desde hace algunos meses han aparecido personas decapitadas en las calles de Puerto Príncipe; junto a los cuerpos dejan mantas en donde los grupos de autodefensa se atribuyen los crímenes señalando que a todo a aquel que ande metido en la delincuencia organizada terminará igual.
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