Tras su muerte, la madre del ahora occiso comentó a medios locales que su retoño no trabajaba ni estudiaba (era una fichita), pero que pagaba todos los gastos de la casa gracias a su trabajo en la delincuencia. El chico, antes de ser disparado, traía consigo siete mil pesos que se había robado de otros establecimientos.
Dicen que para una madre ningún hijo es malo, pero las declaraciones que dio la señora dieron bastante de qué hablar, pues para los internautas de la red, el “Bebé” sí era malo, pero no sólo eso, también peligroso. Muchos consideraron que la muerte del menor de edad salió beneficiosa para la sociedad, aunque aún faltan sus amigos maleantes por ser atrapados.