Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
El contralor interno del ayuntamiento de Papantla, Ricardo Wall Reyes, es señalado de encabezar una conjura para despojar de su propiedad a una anciana de 84 años. *** La señora Jeysira Carrión Bandala denunció que directivos municipales en Papantla se han negado a entregarle su cédula catastral, con el argumento de que “llegó un oficio del juzgado segundo” que les ordena retener dicho documento. *** Familiares de la octogenaria dama confirmaron en dicho juzgado que no existe tal oficio, por lo que regresaron al ayuntamiento para conocer la verdadera razón de que le hayan negado dicho documento. *** El ingeniero Abel Cano Escalante, director de Desarrollo Urbano, argumentó que había recibido órdenes de la Dirección Jurídica cuyo titular, Emanuel Padilla Martínez, dijo haber recibido órdenes de la síndica Zaidi Hernández Gómez. *** En realidad la falsa versión del supuesto oficio girado por el juzgado surgió de la Contraloría Interna, cuyo titular, Ricardo Wall Reyes, dispuso que se detuviera todo trámite relacionado con la propiedad de la señora Jeysira Carrión Bandala pues había “una investigación en curso”. *** La agraviada, quien radica en Xalapa y enfrenta problemas de salud cada que se ve obligada a trasladarse a Papantla, se dijo sorprendida de que el contralor se tome atribuciones que no corresponde a su cargo, y pidió públicamente el apoyo del Congreso de Veracruz y del gobernador Cuitláhuac García para que no la despojen de un predio que es su único patrimonio.
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Fue él quien abrió fuego en los medios de comunicación y, cuando se le acabaron los argumentos, decidió que no va a caer “en juegos mediáticos”. Ni como distractor le sirvió el sainete.
El gobernador Cuitláhuac García fue cuestionado respecto a la puntual respuesta que dio Javier Duarte de Ochoa a las amenazas que lanzó contra jueces federales, si le conceden algún amparo.
Reaccionó molesto y cortó de tajo los cuestionamientos. Lo que pasó por alto fue que los reporteros y “los medios” tienen muy claro que fue él quien empezó con ese juego.
Envalentonado tras comprar la “brillante idea” de lanzar una ofensiva contra el Poder Judicial de la Federación (“para que el presidente sepa que estamos a muerte con él”) y advertido de que avanzaban las gestiones de la defensa de Javier Duarte, al gobernador le pareció oportuno mandarles un “aviso” a los jueces, para que entendieran que no los pierde de vista.
Nunca se imaginó que Javier Duarte respondería, ni que el despacho que lo defiende publicara un comunicado exhibiendo las falsedades surgidas en Palacio de Gobierno.
No le quedó otra que enredarse en chismes de lavadero: que si Duarte, Osorio Chong y Yunes Linares tenían acuerdos, que si fueron liberados funcionarios de la administración duartista con “pagos” millonarios.
Y para concluir de una vez por todas con el tema, se acordó que el expediente en contra de Javier Duarte lo tiene la fiscalía General del Estado (FGE) y ese organismo “no litiga en los medios”, por que -reconoce- “luego se revelan hasta las estrategias, entonces no se va a hacer justicia”.
El clásico cantinfleo que le surge a Cuitláhuac García cada que se queda sin respuestas ensayadas para los cuestionamientos (muchos de ellos “sembrados”) de la prensa.
Por lo pronto, su “desliz” frente a los medios le sirvió a Javier Duarte para reactivarse, para volver a colocarse en los medios. Logros mínimos, quizá, pero muy valiosos para quien lleva tanto tiempo encerrado.
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Epílogo.
Todos en el sector magisterial lo saben: cada 15 de mayo el presidente anuncia un aumento salarial retroactivo al primero de enero. Nadie con un poquito de experiencia en el servicio público, mucho menos si está atendiendo el sector educativo, se puede dar por sorprendido. *** El aumento salarial anunciado por el presidente (8.2%) es concordante con el nivel de inflación en el que terminó el 2022, por lo que en el rubro de “previsiones salariales” debió quedar considerado. Si no fue así, es que alguien está más ocupado en el 2024 que en hacer su tarea. *** El bloqueo de transportistas a la zona portuaria de Veracruz ya fue levantado. Las autoridades aduanales dialogaron con los manifestantes y llegaron a acuerdos para agilizar el movimiento de carga en esa zona. *** El comunicado oficial reconoce que “la fase de reequipamiento de Aduana está en proceso, lo que ha ocasionado inconvenientes que han afectado a los operadores de autotransporte”, por lo que -admitido por la propia aduana- los transportistas tenían razón en protestar. Estaba de más, pues, que el gobernador (a quien nunca tomaron en cuanta para resolver el conflicto) saliera a amenazar a los transportistas. *** ¡Qué pronto se le olvidó cuando él participaba en marchas, plantones y bloqueos!
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