El panorama en el exterior no luce nada bien para nuestro país. El talante soberbio del presidente López Obrador contra sus detractores, contra la prensa crítica y su terco afán de controlar al órgano electoral, han llamado la atención al congreso norteamericano.
Al menos ya logró unir en su contra tanto a demócratas como a republicanos en el Congreso y lo peor de todo es que parece que la paciencia de Biden se agota pues el Departamento de Estado, criticó el llamado Plan B que impulsa el presidente López Obrador.
Y es que, no fue poca cosa que el domingo pasado, y no pasó desapercibido para el país vecino, la protesta multitudinaria de 300 mil manifestantes en el zócalo que se oponen al Plan B. De modo que, tenga por seguro que la resolución de la Suprema Corte de Justicia ante la lluvia de impugnaciones por la oposición, tendrá encima los ojos de diputados republicanos y demócratas del país vecino. Aunque esto, le cause agruras al inquilino de Palacio Nacional.
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