Tal parece que el presidente López Obrador olvida que el principio de división de poderes constituye uno de los pilares fundamentales de cualquier sistema democrático. Sus filosas críticas contra la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, son un agravio contra el poder judicial. Olvida que su observancia del principio de división de poderes supone la verdadera existencia del estado democrático y del ejercicio de las libertades.
Esa postura irrespetuosa, no habla bien del presidente y lo que es peor, es que no faltan los queda bien, que buscan imitarle. Tal es el caso de la senadora del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Citlalli Hernández Mora, quien inmediatamente respaldó las acusaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) hacía la recién nombrada presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández.
Según la inefable senadora morenista, la llegada de la ministra ha generado una serie de supuestos beneficios de exfuncionarios integrantes de los partidos opositores. “A partir de la llegada de Norma Piña a la presidencia de la SCJN se ha beneficiado personajes innombrables como Rosario Robles, Cabeza de Vaca y a liados de García Luna. Por esto 7 de cada 10 mexicanos consideran que los jueces son corruptos”, destacó la senadora de la República.! ¡Cómo ven!, lo que hay que hacer, para no perder la gracia divina del amo y señor de la 4T.
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