En el extranjero México está quedando como una simple república bananera, donde el presidente cumple sus caprichos gracias a que mantiene el control del Congreso. Para muchos analistas extranjeros el Plan B de López Obrador, busca debilitar la autonomía del INE, retirándole presupuesto, capacitación, difusión y control. López Obrador, señalan, quiere regresar a los tiempos en que el PRI era el partido con el control absoluto de las elecciones, donde el presidencialismo era una tradición democrática. Señalan que «López Obrador busca cimentar su dominio político»; busca resucitar las peores prácticas del PRI.
Ante esta situación hace un llamado el presidente de los Estados Unidos, el demócrata Joe Biden. Reprocha el Financial Times que «es momento de que los aliados y amigos de México alcen la voz. La Unión Europea debería encontrar el modo de hacerlo. Pero lo más importante es que lo haga Estados Unidos, vecino de México y su principal socio comercial».
Estados Unidos ha reclamado a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua por su forma autoritaria de gobierno, «pero curiosamente se mantiene en silencio acerca del mismo fenómeno en su aliado latinoamericano más importante. Esto tiene que cambiar».
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