En redes sociales, los que conocen al influencer Luisito Comunica saben que él no hace nada gratis, que lo suyo es generar ganancias, aunque para ello tenga que vender su dignidad. Hace unos días Sabrina Sabrock apareció en un video promocionando el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. La vedette, actriz porno también, hablaba junto con su pareja de las “maravillosas” instalaciones del AIFA. El video lo subió a redes el propio gobierno federal. Días después le tocó a Luisito Comunica, quien al igual que la actriz porno, promocionó las bondades del «mejor aeropuerto del mundo, mundial», según López Obrador.
Por supuesto, de inmediato en redes sociales criticaron al influencer vedette, pues para muchos era obvio que se había vendido. Como respuesta a esas críticas el influencer vedette declaró: «Uno ya no puede decir ni algo bueno ni algo malo de su propio país, porque ya a huevo alguien le pagó. (…) Uno no puede decir algo bueno porque te pagaron por ese algo bueno. Uno no puede decir algo malo porque ya le pagó la oposición por decir algo malo. No me pagaron. Yo pagué por volar, yo pagué por grabar ese video».
En otro momento dijo: «Como si yo necesitara que me pagara el gobierno». Eso es cierto, él no necesita que le pague el gobierno, a lo mejor lo de perder la dignidad lo haga de gratis.
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