Se engoriló Gerardo Fernández Noroña, diputado del Partido del Trabajo porque el líder nacional de Morena lo excluyó de debates y encuestas entre los presidenciables de ese partido. Noroña mandó una carta a Mario Delgado en la que anotaba, en nueve puntos, las razones por las que debería ser incluido entre los presidenciables. Tantas veces que Noroña se ha hincado a besar los zapatos del presidente y que no lo incluyan entre los presidenciables, pues de qué estamos hablando.
Mario Delgado, con un gesto condescendiente, medio de burla, medio de paternidad, ya le respondió al diputado Noroña: “Reconocemos tu lealtad al movimiento, al presidente de la República, a este proyecto y la manera tan combativa con la que has enfrentado a los paniaguados, como tú les dices, y a toda la bola de conservadores. La unidad es lo fundamental y estoy seguro que nos ayudarás a construirla (…) Bienvenido Gerardo, eres nuestro amigo y siempre vas a estar con nosotros”.
Por supuesto, los entendidos saben que a Gerardo Fernández Noroña lo están invitando a la fiesta, pero para que baile en el patio. Ya sólo faltó que le dijeran, “comes y te vas”.
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